El retablo mayor de la iglesia parroquial de Zurbano se ha restaurado a través del convenio suscrito con el Obispado de Vitoria para la Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural propiedad de la Diócesis, convenio de la Comisión Mixta Diputación-Obispado.
Es el motivo por el que la diputada de Cultura y Deporte, Ana del Val, ha visitado hoy junto con el vicario de la diócesis, Carlos García Llata, la directora de Cultura, Inmaculada Sánchez, y la jefa del Servicio de Restauración, Cristina Aransay.
La intervención de conservación y restauración se ha llevado a cabo entre los años 2022 y 2023 y bajo la dirección técnica del Servicio de Restauración con una inversión de 68.219,80€ entre ambas instituciones.
Se trata de un retablo romanista de grandes dimensiones, 11 metros de alto x 8,50 metros de ancho. El retablo de san Esteban de Zurbano está realizado por el taller de Pedro de Ayala en la primera mitad del siglo XVII, y dorado y policromado unos años después. Se trata de un retablo ochavado, que se adapta perfectamente al ábside de la iglesia, realizado en madera policromada y dorada, en el que destaca la calidad artística del sagrario. Este sagrario-tabernáculo monumental consta de 18 relieves y 30 esculturas y según los historiadores es el sagrario con el mayor número de tallas y uno de los más bellos del bajo renacimiento existente en la Diócesis.
Las principales alteraciones que tenía el retablo eran la oxidación de los barnices antiguos, los repintes y numerosos retoques de purpurina que impedían apreciar la calidad cromática. Además, el soporte de madera presentaba un debilitamiento puntual, causado por un ataque de insectos xilófagos que fue tratado en su momento, desencolado de piezas y pérdidas de volumen motivadas por roturas.
También se han encontrado alguna zona quemada por la proximidad de las velas y la oxidación de elementos metálicos. La zona de la predela presentaba levantamientos puntuales del estrato pictórico. Para conocer la composición y la técnica pictórica de la obra se han realizado diversos análisis de capas pictóricas, barnices e identificación de maderas que han ayudado a conocer los materiales empleados.
Así se han identificado diferentes tipos de madera en la construcción, como roble, nogal y peral. En cuanto a los pigmentos empleados, predominan el azul y verde de cobre, bermellón y laca rojo. En cuanto a la técnica pictórica el policromador empleó el óleo para las carnaciones y el temple para los ropajes que fueron cubiertos con posterioridad con una resina natural. Finalmente hay que destacar la gran pureza de la lámina de oro aplicada, con una aleación del 96% de este metal y un 6% de plata.
El tratamiento de conservación y restauración llevado a cabo por la empresa CROMA ha consistido en:
–Eliminación de la suciedad acumulada.
-Fijación y sentado de la policromía.
–Consolidación del soporte de madera.
–Desinsectación.
–Sujeción de los elementos sueltos.
–Limpieza de los dorados y capas pictóricas y eliminación de repintes.
–Tratamiento de los elementos metálicos.
–Reintegración volumétrica.
–Estucado de lagunas
–Reintegración cromática.
–Protección final.
Todo el tratamiento ha sido documentado exhaustivamente y se han seguido en todo momento los criterios y las metodologías marcados por el servicio de restauración.