El programa de Deporte Escolar de la Diputación Foral de Álava cuenta con una normativa reguladora de la inspección, que desarrolla la Norma Foral 21/2020 del Deporte Escolar que las Juntas Generales aprobaron el 28 de octubre de 2020.
Lo ha presentado hoy en comisión, la diputada foral de Cultura y Deporte Ana del Val, quien ha asegurado que este reglamento (concretamente la Orden Foral 320/2021 de 18 de noviembre), “no tiene como finalidad la sanción, sino detectar actividades o situaciones que no están permitidas y corregirlas para evitar que se repitan, y cumplir con ello los objetivos públicos del deporte”. “Tiene que quedar claro -ha insistido- que no es que los agentes deportivos no cumplan con la normativa, pero bien es cierto que normalmente por desconocimiento o por hábitos arraigados durante años, hay situaciones que se pueden mejorar. Es decir, el reglamento es una garantía”
El reglamento incluye:
– La vigilancia y control del cumplimiento de disposiciones legales en materia de deporte
escolar.
– La supervisión del cumplimiento de valores educativos.
– El asesoramiento, orientación e información a las diferentes entidades deportivas.
– Comprobación de reclamaciones y denuncias a entidades y/o personas sobre presuntas infracciones o irregularidades.
– Verificación de datos facilitados para la obtención de subvenciones.
– La elaboración de actas tras una inspección.
– El informe final de la misma
– Además, habilita para inspeccionar el transporte contratado por la Diputación a fin de facilitar los desplazamientos de los escolares.
– Por supuesto, se podrá supervisar que todas aquellas actividades fuera de programa o en días no habilitados para tal fin, cuenten con la correspondiente autorización del servicio de deporte de Diputación.
Todas estas acciones serán realizadas por los Técnicos Superiores de Deporte de la propia
Diputación Foral de Álava, los cuales han sido habilitados para tal fin.
Una vez que los Técnicos estén formados en materia de inspección, se pasará a la siguiente fase, que es la elaboración de un plan de visitas y de actuaciones por iniciativa del servicio de deporte, además de las que se realicen como consecuencia de alguna reclamación o denuncia.
“Este curso, por tanto, podríamos decir que es de implantación progresiva, cara a su implantación definitiva a comienzos del curso 22-23” ha indicado. “Como no puede ser de otra manera, informaremos a Federaciones, clubes, AMPAs, y cualquier otra entidad participante del deporte escolar, explicándoles en que consiste y cuál será el procedimiento que ponemos en funcionamiento” ha señalado.
Otros reglamentos
La comisión ha servido también para explicar las otras dos normativas de desarrollo de la Norma Foral del Deporte Escolar. Concretamente la Normativa Reguladora de los programas de deporte escolar (Orden Foral 50/21) y la Normativa reguladora de la campaña de deporte escolar del curso 21/22 (Orden Foral 238/2021).
La primera de ellas es la que desarrolla de forma específica todos los aspectos de la norma, salvo las concreciones de cada curso y la cuestión de la inspección. Objetivos, entidades, categorías, juegos escolares, licencias, inscripción, autorizaciones, etc.
La segunda de ellas describe la campaña concreta del curso 2021-2022, “lo que permite, de forma más ágil, cambiar de un año a otro todas las novedades que se presenten en cursos futuros, adaptándose a las circunstancias de cada año. Un ejemplo es que el actual reglamento, regula en su artículo 13 las actividades en modalidad no presencial, una cuestión que se ha tenido que introducir fruto de la pandemia.
Álava tiene desde octubre de 2020 una Norma Foral del Deporte Escolar, un paso administrativo necesario que permitía una habilitación de competencias y sobre todo mejorar la función de regulación, orientación y reglamentación del os objetivos de las políticas públicas del deporte escolar por parte del departamento.
“Siempre estamos trabajando para la mejora en la gestión del deporte escolar, sin perder de vista, que todo ello repercute directamente en la calidad de la actividad física que hacen los escolares, en su calidad de vida y, en definitiva, en su desarrollo integral” ha concluido Del Val.