Cuatro artesanas alavesas, Irantzu Ciervide, María Ángeles Peña, Edurne Arteche y María Jesús Blanco, han sido las ganadoras del Certamen Blas de Arratibel 2017 que convoca la Diputación Foral de Álava para reconocer los mejores trabajos de artesanía de Euskadi y el Condado de Treviño. Los trabajos galardonados estarán expuestos en el Museo Bibat hasta el próximo 10 de diciembre.
La Diputada de Fomento del Empleo, Comercio y Turismo, y Adóm. Foral, Cristina González Calvar, ha presidido hoy el acto de entrega de los premios celebrado en el Museo Bibat y ha subrayado la importante labor que realizan los artesanos y las artesanas al “mantener y transmitir la cultura local y los oficios tradicionales. Quiero reconocer y poner en valor el trabajo de unos profesionales que ponen en cada pieza, única e irrepetible, un trozo de su propia vida”.
“Y que en ocasiones, como sucede con las obras premiadas hoy, utilizan la artesanía como vehículo para expresar ideas y denunciar las injusticias del mundo que nos toca vivir, combinando así arte y compromiso. Doble mérito”, ha añadido.
Irantzu Ciervide ha sido reconocida con el Premio a la Artesanía de Nueva Creación por su obra ‘Pasión por sobrevivir’, un trabajo textil creado mediante la técnica de patchwork y un acolchado hecho a máquina. Esta obra toma como punto de partida un imagen extraída de “Vidas minadas”, libro del fotógrafo y periodista Gervasio Sánchez que muestra el día a día de personas víctimas de las minas antipersonas.
El marco de la obra, que representa el mar, y la frase que lo acompaña, “Deseo que el Mediterráneo deje de ser el nicho de los débiles”, terminan de dar forma al mensaje de denuncia social del trabajo de Ciervide. El Premio a la Artesanía de Nueva creación está dotado con 1.550 euros.
Trabajo colaborativo
La obra “Esconjurandero, cosiendo paisajes, cosiendo viajes, cosiendo historias, cosiendo mundos…” de las también alavesas María Ángeles Peña, Edurne Arteche y María Jesús Blanco ha sido galardonada con el Premio Especial dotado con 1.220 euros. Se trata de un trabajo colaborativo realizado en grupo a partir de telas recicladas de prendas de vestir y ropa de hogar, y gasas tenidas de distintos colores.
El resultado son cuatro ‘paredes’ de tela con un espacio hueco en el interior que representan los paisajes, los viajes, los sentimientos y las historias de las autoras. El original título hace referencia al nombre dado a pequeñas construcciones o templetes construidos entre los siglos XVI y XVIII en el Pirineo para albergar rituales destinados a esconjurar o conjurar tormentas, plagas y otros peligros que amenazaban a las cosechas.
Un total de 18 obras de otros tantos artesanos y artesanas han concursado este año en el certamen de artesanía ‘Blas de Arratibel’. Todas las obras estarán expuestas hasta el próximo 10 de diciembre en el Museo Bibat. Las dos obras ganadoras se podrán admirar también con posterioridad en la Feria Navideña de Artesanía que abrirá sus puertas el 16 de diciembre en la Plaza de la Provincia de Vitoria-Gasteiz.