La Diputación Foral de Álava convocará este año una Oferta de Empleo Público (OEP) de 40 plazas para cubrir 36 vacantes en puestos administrativos (C1) y 4 vacantes de veterinario/a (A1) tras haber sido negociada durante los últimos meses con la Junta de Personal. El proceso selectivo comenzará previsiblemente el mes de junio e incluirá también las 51 plazas de la OEP 2017.

La diputada de Fomento del Empleo, Comercio y Turismo, y Administración Foral, Cristina González, ha presentado hoy en rueda de prensa el esquema de la OEP 2018 que será elevada mañana al Consejo de Gobierno Foral para su aprobación y ha subrayado que “cumplimos así con nuestro compromiso de dar estabilidad y rejuvenecer la plantilla foral, y garantizar unos servicios públicos de calidad a corto y medio plazo”.

González ha explicado el proceso selectivo de la OEP 2017 y la OEP 2018 se llevará a cabo de forma conjunta a lo largo del próximo año de acuerdo al siguiente calendario: las bases generales y específicas de estas convocatorias se aprobarán y publicarán el próximo mes de enero con el objetivo de que las primeras pruebas tengan lugar a finales de primavera, previsiblemente en el mes de junio.

Este proceso selectivo sacará de esta forma a concurso-oposición un total de 91 plazas (51 de la OEP 2017 y 40 de la OEP 2018) de los siguientes grupos profesionales: 79 administrativos/as, 4 veterinarios/as, 4 inspectores/as auxiliares de tributos, 2 inspectores/as de tributos y 2 técnicos informáticos. La mayor parte de estas plazas, 82, se adjudicarán mediante sistema de acceso libre y las 9 restantes mediante sistema de promoción interna.

Además, del total de 91 plazas, se reservarán 8 para personas con discapacidad.

Estrategia de legislatura

La diputada foral ha explicado que la OEP 2018 “no es una medida aislada, sino que se enmarca en la estrategia puesta en marcha al inicio de la legislatura para reducir la tasa de interinidad de la plantilla y proceder a su renovación. Una estrategia que tenía y tiene un objetivo adicional: actualizar los perfiles profesionales del personal a las necesidades reales de la institución y las demandas de la ciudadanía, y reforzar la lucha contra el fraude fiscal”.

“Su fin último es garantizar unos servicios públicos de calidad para las y los alaveses a corto y medio plazo”, ha añadido.

El primer paso de esta estrategia tuvo lugar en 2016 con la aprobación de una primera OEP con 78  plazas de los grupos A1 y A2 (titulados medios y superiores) y los nuevos funcionarios de esta convocatoria se están incorporando en estos momentos a sus puestos. El Gobierno Foral aprobó hace ahora un año una segunda oferta, la OEP 2017, con 51 plazas; y aprobará mañana una tercera OEP dotada de 40 plazas.

Ambas se fusionarán en un mismo proceso selectivo que tendrá lugar a lo largo de 2019.

Cristina González ha subrayado que “hemos aprovechado al máximo la tasas de reposición para cubrir las plazas vacantes en las cinco categorías profesionales incluidas en las OEP 2017 y 2018. De hecho, y si tomamos como referencia la fecha del 31 de diciembre de 2018, la tasa de interinidad con las plazas ofertadas sería del 0% entre los administrativos/as, los inspectores/as de tributos y auxiliares, y los técnicos/as informáticos”.

La situación previa a estas convocatorias es bastante diferente y, por ejemplo, la tasa de interinidad entre los administrativos/as es hoy de casi el 40%. “Además de reducir hasta mínimos la tasa de interinidad en estos grupos, el desarrollo conjunto de las OEP 2017 y 2018 nos va a permitir renovar las Bolsas de Trabajo de todas estas categorías, bolsas que se encuentran ahora mismo agotadas”.

La diputada foral ha recordado que además de convocar tres OEP a lo largo de la legislatura que suman 169 plazas “hemos practicado también al mismo tiempo el diálogo y la negociación con los sindicatos representados en la Junta de Gobierno cerrando acuerdos sobre condiciones laborales y salariales. El resultado de estas políticas va a ser una plantilla foral más estable, joven y motivada; una Administración más eficiente y eficaz; y, como decía, la garantía de unos servicios públicos de calidad a corto y medio plazo”.